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lunes, noviembre 07, 2005

Infierno

Carátula de la películaEl sábado pasado pusieron en la tele una de esas cutrepelículas con las que tanto disfruto: Infierno. Perteneciente al género de catástrofes, y con un presupuesto de TV (que se nota en algunos efectos realmente malos), nos muestra cómo una terrible ola de calor invade el planeta, producida por un fragmento de la corona solar que se dirige a la Tierra.

Al principio de la película, un grupo de científicos explican al militar de turno (y de paso, a los espectadores) que se ha producido una "expulsión de corona" debido a una "tormenta nuclear" en el Sol. En ese momento, una nube de material solar se dirigía a la Tierra a una velocidad de 1.600.000 km/h, y tardaría unas 90 horas en llegar. Añaden además algo relativo al "campo magnético interplanetario", que hace que la nube en cuestión se dirija hacia el sur, o algo así. Es una pena que no recuerde exactamente el diálogo.

Veamos. Existe un fenómeno solar denominado eyección de material coronal (EMC), en el que gas en forma de plasma, perteneciente a la corona solar, es expulsado a gran velocidad, superando la velocidad de escape en la superficie del Sol. Eso quiere decir que el plasma no vuelve a "caer" sobre el Sol, como ocurre con las protuberancias solares, si no que consigue alejarse del Sol.

Las cifras que da la película no son del todo disparatadas. La velocidad de escape en la superficie del Sol es de unos 2.200.000 km/h. Vaya, es mayor que la velocidad de la nube. ¿Quiere eso decir que es imposible que se dirigiera a la Tierra? Bueno, si esa fuera la velocidad inicial, sí sería imposible. Pero puede ocurrir perfectamente que cuando midieran la velocidad de la nube, ya se hubiese alejado bastante del Sol. A unos 800.000 km de la superficie del sol (Mercurio está a casi 58.000.000 km), la velocidad de escape ya es de poco más de 1.500.000 km/h.

Por otro lado, a 1.600.000 km/h, se tardan casi 94 horas en recorrer la distancia entre el Sol y la Tierra. Aquí tenemos un problema, y es que debido a la gravedad del Sol, la nube estaría decelerando constantemente, por lo que debería tardar muchísimo más. Bueno, también podemos suponer que la nube estaba lo suficientemente lejos del Sol en ese momento. Después de todo, no recuerdo que en algún momento dijeran a cuánta distancia estaba de la Tierra.

Tenemos además esa mención al "campo magnético interplanetario". ¿Existe algo así? Bueno, sí y no. El Sol tiene un campo magnético que se extiende hasta la órbita terrestre y más allá, si bien a nuestra altura, la intensidad es unas 10.000 veces menor que el terrestre (es del orden de 10-9 T, mientras que el terrestre es del orden de 10-5 T).

Entonces, ¿estamos hablando de buenaciencia en la película? Bueno, hay que reconocer que los guionistas han procurado buscar algo de información. Los 1.600.000 km/h corresponden a un millón de millas por hora, que es la cifra dada por la web del MSU Solar Physics Group como velocidad media de una EMC. Pero esa es sólo una velocidad media. La velocidad de una EMC es mucho mayor al principio, y va decreciendo a medida que se aleja del Sol. Además, el campo magnético solar sólo es importante en la formación de la EMC. No "guía" el material expulsado como se sugiere en la película. Una vez lanzado, lo único que determina su trayectoria es su velocidad y dirección inicial.

Pero esto son sólo sutilezas. El mayor error de la película es presentarnos una EMC como una inmensa bola de fuego que calienta la Tierra hasta temperaturas insoportables, superando los 60 ºC en Los Ángeles, que es donde viven los protagonistas. Al final, incluso vemos una escena de una playa, en la que el mar parece hervir, y explosiones enormas en una vista desde el espacio.

Una EMC no es nada de eso. Vale, estamos hablando de miles de millones de toneladas de plasma procedentes de la corona, y ésta tiene una temperatura de millones de grados. Eso puede asustar un poco y hacer pensar en una bola de fuego apocalíptica. Pero hay que tener en cuenta que la densidad del plasma expulsado es pequeñísima. La zona de mayor densidad de la corona solar se encuentra en las cercanías de la superficie solar, y es 100 billones de veces menor que la densidad de la atmósfera terrestre a nivel del mar. Una EMC tiene una densidad aún menor, puesto que como cualquier gas, se expande. En este contexto, la temperatura no es importante.

Lo importante es que una EMC es básicamente una nube de electrones y protones que se mueve a una velocidad muy elevada. La atmósfera y el campo magnético de nuestro planeta nos protegen de ellas, de forma que no llegan a ser peligrosas. El mayor daño que puede hacer una EMC especialmente intensa es interferir las transmisiones de radio, y dañar satélites de comunicaciones, o incluso instalaciones eléctricas. Esto es debido a que, después de todo, estamos hablando de particulas cargadas eléctricamente viajando a gran velocidad. Sin embargo eso es todo.
Representación artística de partículas solares interactuando con el campo magnético terrestre.

Una EMC no es una terrible bola de fuego, y en eningún caso aumentaría un sólo grado la temperatura de nuestro planeta.

3 comentarios:

  1. Muy clarificador. Y una pregunta, espero que no indiscreta: ¿algún fenómeno podría hacer hervir los mares? ¿un asteroide quizás?

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  2. Quizás uno con la energía cinética suficiente (masa y velocidad). Y supongo que no sólo haría hervir los mares, sino que también indendiaría una gran parte de la superficie terrestre.

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  3. Sí. "Tormenta solar" es el nombre genérico que recibe una perturbación del campo magnético terrestre, producida por cualquier fenómeno solar. Una tormenta solar puede ser causada por una EMC.

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