
Y es que una centrifugadora, como su nombre indica, crea la aceleración de varias g mediante fuerza centrífuga. Por tanto, si queremos que la fuerza esté dirigida desde delante hacia detrás en un ser humano, éste debe sentarse mirando hacia el eje de rotación, no hacia la dirección del movimiento.
Supongo que la secuencia de Moonraker y de muchas otras películas, es debida a la errónea creencia de que el cuerpo humano (o sencillamente cualquier objeto) es sensible a la velocidad. Y esto no es así. Nosotros no podemos sentir si vamos rápido o no, a menos que miremos algún otro objeto de referencia. Sólo podemos sentir las aceleraciones, y eso queda bien patente viajando en avión. La velocidad de crucero de un vuelo comercial es de unos 900 Km/h pero no sentimos nada salvo en el despegue, aterrizaje o cuando hay turbulencias. Sólo podemos sentir la velocidad si vamos desprotegidos y el aire nos golpea, pero precisamente lo que sentimos es eso: el golpe de aire, no la velocidad. Con los ojos vendados no podríamos distinguir si hace viento o estamos en un vehículo en marcha (silencioso y sin traqueteos, claro). Y si vamos en tren o en avión, por ejemplo, con los ojos vendados no podríamos decir donde hacia nos movemos.
Si es que vamos muy rápido en este mundo. Solo sentado en mi sofá no paro de moverme. Giro alrededor de la tierra a unos 1100Km/hora (si estuviese en el ecuador 1670Km/hora)
ResponderEliminarY además nos movemos a más de 107.000 km/h en nuestro recorrido alrededor del sol, y a 781.200 km/h en nuestro viaje por la galaxia (no es que me lo sepa de memoria, es que la Wikipedia es cojonuda). Velocidades de vértigo :-)
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